Son las cuatro de la tarde, Eduardo Casanova llega al estudio “A” de la Sociedad de Autores y Compositores de México donde grabará algunas canciones.    Mientras se prepara para grabar la última canción de la sesión me cuenta como inició todo, “Mi primer contacto con la música fue a los seis años. Empecé tocando un violín de juguete que se encontraba en mi casa, mis papás, al ver que me gustaba mucho me compraron uno de verdad. Pasaron los años, aprendí a ejecutar otros instrumentos y así iba practicando junto a mis hermanos“.

​

​   En su adolescencia empezó a estudiar música, “Ingresé al Conservatorio Nacional de Música cuando tenía dieciocho años, sin embargo, no estuve mucho tiempo ahí porque era muy indisciplinado. El director ya no me aguantaba más; me expulsó, me dijo que jamás llegaría a ser músico. Mis papás se sintieron decepcionados de mi. Me retiraron su apoyo económico, eso complicó más las cosas”. Guarda sus cosas, todo está listo para partir del estudio de grabación, escuchamos los últimos detalles de la sesión.